


Los 10 libros que más me gustaron en 2022

Marruecos y el mundial de fútbol

Nación española, nación marroquí, las libertades individuales

Gira de lanzamiento de El latido de Al-Magreb y segunda edición

El latido de Al-Magreb: mi nueva novela

Vicente Saavedra, engrandecer el arte

Preguntas que me provoca Salvar el fuego, de Guillermo Arriaga

A propósito de la retrospectiva de Alfonso Delgado

Giovanna Rivero, excelsos relatos.

Juan Manuel Gil, Trigo limpio. ¡Ostia, qué bien!

Casa de muñecas, Ibsen (lo que hubiese dado por estar allí)

Sobre una experiencia lectora (que me perdone el cine, el teatro…)

Andrea Abreu y su deliciosa Panza de burro

Mandíbula, de Mónica Ojeda, una novela poderosa

Arizona, de Delirum teatro: biblias y rifles

¿Odio a la juventud? Entre los luditas y la efebifobia

Leer sobre el golpe de estado del 23-F durante la pandemia C-19

Shopenhauer, el covid-19 y la naturaleza positiva del dolor

Muestra Canarias en corto 2020

Pepe Naranjo, y la África del día a día

Los últimos que saltamos el muro de Berlín

Afrotopía, interesante pero…

En recuerdo del Dr. Chiscano.

Semblanza de Alfonso

Decálogo (más uno) sobre Antonio Lozano

Prólogo de Sona Mariama y otros cuentos populares de Gambia

Ce qui m’est arrivé avec deux auto-stoppeurs

Hondura y belleza

Sobre lo que me sucedió al recoger a dos autostopistas

Sucedió anoche, así, de improviso

Encuesta sobre la literatura canaria.

Un brindis por los actos irreflexivos

En una librería de segunda mano en Jakarta

Experiencia fantástica en la ONCE de Oviedo

Patria, la cárcel de aquel nacionalismo

¿Mundos opuestos, incomprensibles?

La democracia en lugares peligrosos

Reseña de Tal vez Dakar en elpais.com

Una reflexión sobre Cuba

¿Por qué hay países empobrecidos?

¿Burkini sí o burkini no?

La historia de A, B, y C.

África 2050, oportunidades y amenazas

¿Por qué acaricio los libros?

Mandela, siempre.

Todos deberíamos ser feministas

El (inesperado) taxista de Nueva York

Instrucciones para disfrutar Tú eres azul cobalto

Un sudario, de Rafael José Díaz

El lápiz del carpintero

El mundo deslumbrante, Siri Hustvedt

Birdman

El invitado amargo, Molina Foix y Cremades

La fotografía, de Penelope Lively

Canarias, islas de novela, en México

La utilidad de lo inútil

Desinsularizar las mentes (y decálogo)

Arribismo y arbitrariedad, la administración del XIX

¿Tenemos todos un lado oscuro? Luisgé Martín

Homer y Langley, sublime interpretación

La mancha humana, extraordinaria novela

Melini y Ndoye

Crisis de los cuarenta. Luisgé Martín

Una mujer herida: Los caminos de Aissa

Presentación de “La felicidad amarga” en Agüimes

“Cada muñera rusa es una etapa en la vida de Rafa”

Laberentia: Alfonso Delgado en la frontera

Volando a Cabo Verde

Santa Cruz ciudad leída

El escritor no es otra cosa que sus propios fantasmas

Ignacio del Valle – Busca mi rostro

Los niños de la lata de tomate. Cecilia Domínguez Luis

El Futuro

¡Ay cultura!

¿Por qué no?

África, Canarias y el SILA

G21, ladrones

Océana, de Alfonso Delgado

Boris Boubacar Diop

La belleza, Midnight in Paris, de Woody Allen

Islas en el mundo

Generación 21, los cineastas, el TEA y Óscar Domínguez

Sobre “La ciudad de las miradas” por Fernando Delgado

Generación 21, nuevos novelistas canarios

Viaje al corazón de lo verdadero

Amor, compromiso… Molina Foix

Búsqueda, McCarthy.

El oscuro presente de la literatura canaria

¿Qué ocurre en Costa de Marfil?

Mauritania: y el cielo se ha olvidado de llover

La paz de los vencidos

Casi, casi iguales; iguales

La ciudad de las miradas en Agüimes

Geografía accidental, María Jesús Alvarado

Tribus saharauis, de Sophie Caratini

Nicolás Melini

España, aparta de mí estos premios. Iwasaki

El buscador de Áfricas, de Henri Lopes
